Friday, June 17, 2011

Antes de continuar...

Después de cuatro intensos días en la capital española seguimos viaje hacia el sur. De Madrid me llevo la amabilidad y la calidez de su gente, porque allí, "vosotros sois bienvenidos".
A mi me divierte conocer una ciudad desde la vida común y corriente. Más que ir al mismo lugar al que van miles de turistas en una fila, todos con cámara en mano listas para disparar fotos, todas en los mismos lugares, como si estuviéramos programados para hacerlo así. Todos aglomerados al rededor de los lugares que son postales en las tiendas a la salida de ese lugar.
Aunque igual lo hago. Mi posición no es tan radical: de todas formas me encantó conocer el Palacio de Cristal, el Museo del Prado estuvo interesantisimo y me tomé una foto feliz con Don Quijote y Sancho Panza, entre otos tantos momentos lindos de mi paso por Madrid. 
Pero no había dicha igual a la del momento de salir del hostel en la dirección que fuera y cruzarme en la calle con gente de todos los rincones del mundo, escuchar infinitos idiomas y acentos a lo largo del camino, tratar de entender los conocidos y adivinar de donde venían los desconocidos. O enfrentarnos al delicioso desafío de tomar un helado al aire libre un día de calor despacio lo suficiente como para disfrutarlo y rápido bastante como para que no se convierta en un charco dulce y pegotudo. O aún, observar a la gente (madrileña por lo general) en el metro: de dónde vienen? Han tenido un buen día? Para donde van? Los espera alguien? Siempre toman este metro? De donde piensan que soy? En fin, un infinidad de pequeñas experiencias que subliman aquellas propuestas en los guías turísticos, y hacen de cada viaje algo especial, único.

Gracias Madrid por tus hermosos y trabajados balcones negros, cargados de ritmo y fuerza. Gracias por las callejuelas que esconden sorpresas. Gracias por tu sol veraniego hasta las 10 de la noche. Gracias por tus semáforos con sonido de pajarito. Adiós, y que nos volvamos a ver. (Intervención de Susana)



r.

1 comments:

Laura Ramírez Aguilar said...

Qué bonito. Quedo a la espera de más reportes desde Granada :p