Thursday, June 16, 2011

Camino por Madrid...

En nuestro ultimo día en la capital española salimos desde por la mañana. Teníamos que volver a Atocha para hacer validar nuestros tiquetes, pues sería muy arriesgado dejarlo para antes del viaje temprano. De todas formas pasar por Atocha es en camino a muchas de las partes a las que podemos ir desde el hostal. No supe, ni pregunté, donde exactamente fueron los atentados del 2005, pero debe haber sido verdaderamente caótico, pues Atocha es la estación de tren más central de Madrid, en una zona turística. Y además de trenes hay dos estaciones de metro y la estación de trenes de cercanías. Es bastante grande. 

Después de tener el asunto de los tiquetes resuelto fuimos caminando al Museo del Prado. Entre los dos museos más importantes de Madrid, ese y el de la Reina Sofía, decidimos ir a ese, pues a Picasso y a Miró los veremos en Barcelona. Visitamos entonces a Velázquez, Murillo y Goya. Bellas pinturas de motivos católicos, y de la realeza sobre todo. Se destacan las Meninas de Velázquez, la Maja Desnuda y la Maja Vestida, y otros varios de Goya. A Susana le gusta más Velázquez, a mí, más Goya. 
Los museos son hermosos, pero agotadores. Salimos de ahí con hambre y ganas de sentarnos. Hicimos una pequeña pausa, antes de continuar. De tras del Museo del Prado está la Real Academia Española, que había que pasar a mirar. Luego, mi Drexlermania nos llevó a Chueca, un barrio ni cerca ni lejos de donde estábamos, donde en algún apartamento, en alguna calle, vive Jorge Drexler cuando está en Madrid. Ahora no está, porque está en Buenos Aires grabando una película. Aplazamos un poco el hambre y fuimos caminando hasta allá. 
Nos salimos de la zona internacional donde lo más seguro es hablar en inglés, pues todos hablan distintos idiomas del portugués o italiano al rumano o ruso, y nos metimos a la vida madrileña común y corriente. Llegamos a la calle Libertad, que no está nombrada en nuestro mapa, pero es una callecita de bares. Ahí pasamos por Libertad 8, bar que auspició los inicios de Drexler. Íbamos en búsqueda de almuerzo, y nos decidimos por una especie de restaurante- alquiler de películas, “el Diurno”. 
Descubrimos cómo funcionaba lo de coger una comida en el mostrador y entregar para que te la sirvan y pagar. Cuando llegamos a pagar el que atendía nos preguntó si “in english”, y le dijimos que no, que en español. Y dijo que como nos veía tan calladas y perplejas. Tenía un acentico no español en el fondo. Nos sentamos, cuando vino a traernos la factura le pregunté si era español ya conociendo la respuesta, era Paisa! Respondió todo como, “no yo soy de… Colombia” como quien dice, igual usted no debe saber dónde queda. Como justamente por eso le había preguntado, le dije que también éramos de Medellín, y se puso todo contento. 
Después mientras yo terminaba mi ensalada, Susana conversó más con el muchacho. Y después salimos a seguir caminando. Queríamos buscar otro bar llamado la Mordida, citado en una rima de Sabina que me presentó Rafa, un amigo, hace unos días: “Para reir... los amigos, para olvidar.... la bebida, para ser feliz... contigo, para todo... 'La Mordida'”. Pero no lo encontramos. Entonces, andando, dimos con a la plaza de Chueca y una heladería como la que nos estábamos imaginando para el postre. 
De ahí si resolvimos irnos en metro de Chueca a la estación más cercana del hostal en esa línea. Se llamaba Opera, y daba en la plaza Isabel II. De Isabel fuimos a Plaza Mayor que el otro dia habíamos pasado literalmente corriendo y nos detuvimos un poco más. El día anterior habíamos descubierto un cine a tres cuadras del hostal (entre Plaza Mayor y éste) donde estaban presentando Lope, la película con la que Jorge Drexler se ganó un Goya este año, y que no han presentado en Colombia. Esa hubiera sido la cereza del dia, y aunque programamos todo para estar puntuales allí a las 5 y media, cuando llegamos no había la película, era una programación diaria, no permanente. En fin, entonces nos fuimos a terminar de arreglar todo, para salir hoy sin contratiempos. 

Les dejo la canción Madrileña de Jorge: 

Helado en Chueca
Camino por Madrid en tu compañía,
Mi mano en tu cintura,
Copiando a tu mano en la cintura mía.
A paso lento, como bostezando,
Como quién besa el barrio al irlo pisando,
Como quién sabe que cuenta con la tarde entera,
Sin nada más que hacer que acariciar aceras. 

Y sin planearlo tú acaso,
Como quién sin quererlo va y lo hace,
Te vi cambiar tu paso,
Hasta ponerlo en fase,
En la misma fase que mi propio paso. 

Ir y venir, seguir y guiar, dar y tener,
Entrar y salir de fase.
Amar la trama más que al desenlace,
Amar la trama más que al desenlace. 

Fue un salto ínfimo
Disimulado,
Un mínimo cambio de ritmo apenas,
Un paso cambiado,
Y dos cuerdas que resuenan con un mismo número en distintos lados,
O el paso exacto de dos soldados,
Como dos focos intermitentes,
Súbitamente así, sincronizados. 

Dos paseantes distraídos
Han conseguido que el reloj de arena de la pena pare,
Que se despedace.
Plaza Mayor
Y seguir que el rumbo que el viento trace. 

Ir y venir, seguir y guiar, dar y tener,
Entrar y salir de fase.
Amar la trama más que al desenlace,
Amar la trama más que al desenlace. 

Ir por ahí como en un film de Éric Rohmer
Sin esperar que algo pase.
Amar la trama más que al desenlace,
Amar la trama más que al desenlace. 

Camino por Madrid en tu compañía. 



Y es lo que hemos hecho, Amar la Trama.

2 comments:

Anonymous said...

Es como soñar despierto....

Pablo said...

Hola Sus-Isa!!!! vi esto y me acordé de ustedes (siq ueiren lo leen en Colombia pa q no pierdan tiempo). Me encanta este blog! Mua

http://www.tv5.org/TV5Site/enseigner-apprendre-francais/jeu.php?jeu=1578#ancre